[:es]Diciembre. Mes de regalos. Amigo invisible, Papá Noel o los Reyes Magos en enero…recibimos todo tipo de objetos (más o menos bonitos) en esta época del año, casi todos ellos con un denominador común: envueltos en papel o cajitas de cartón con multitud de dibujos navideños. Es pues época de alimentar al contenedor azul. Nuestro amigo Papelón también tiene derecho a buenos atracones, como las fechas lo requieren.
Toca hacer un repaso de todo lo que debemos depositar en él: Folios, papeles, cartas y sobres (a pesar de que las felicitaciones online son cada vez más habituales); periódicos y revistas; etiquetas o cajas de cartón (como cajas de juguetes, de zapatos, de cereales, de galletas, de huevos, etc.); los tickets de la compra o las facturas, los cupones de la lotería; los rollos, tubos o cilindros de cartón (como el del papel higiénico, el de cocina o el del papel de aluminio). ¿Fácil, verdad?
En otro de nuestros post, detallaremos lo que NO debemos tirar al contenedor azul, pero haremos un repaso rápido: Cualquier tipo de brik (tiene su cabida en el contenedor de envases, el de color amarillo); las toallitas; las servilletas de papel sucias; las cajas revestidas con cera, metal u otro material que no sea papel o cartón y las fotografías. Tampoco tiene cabida en él las cajas de los medicamentos, a pesar de ser de cartón, ya que tienen un circuito específico de reciclaje (en los puntos Sigre de las farmacias).
Eso es todo. Porque reciclando ahorramos agua, energía y materias primas, además de reducir la contaminación. Porque es época de regalos, también para nuestro planeta.[:]